Las dimensiones ocultas de la pobreza

Se ha reconocido ampliamente que la pobreza es multidimensional, y que OPHI ha tenido un papel destacado para llegar a dicho reconocimiento. Sin embargo, estas dimensiones deben ser especificadas de mejor forma, mientras que algunas han pasado desapercibidas.

OPHI ha identificado cinco Dimensiones Faltantes de la pobreza que las personas que viven con privaciones citan como importantes en sus experiencias de pobreza, y que han sido en gran medida pasadas por alto en los trabajos cuantitativos a gran escala sobre la pobreza y el desarrollo humano. Tales dimensiones son: trabajo informal e inseguro; desempoderamiento; vergüenza, humillación y aislamiento; inseguridad física, y malestar subjetivo. Para recoger datos sobre estas dimensiones, se han desarrollado módulos de encuesta. Ver Dimensiones Faltantes de la pobreza | OPHI.

Para una mejor comprensión global de la pobreza multidimensional, el Movimiento Internacional ATD Cuarto Mundo, junto con investigadores de la Universidad de Oxford, iniciaron en 2016 un proyecto internacional de investigación participativa con el fin de identificar las dimensiones claves de la pobreza y sus conexiones. En esta investigación han participado equipos de Bangladesh, Bolivia, Francia, Tanzania, Reino Unido, y Estados Unidos. Personas con experiencia directa de la pobreza, académicos y especialistas trabajaron como coinvestigadores en equipos nacionales de investigación.

El proceso de investigación denominado Cruce de Saberes (Merging Knowledge – Understanding It – ATD Fourth World Mundo) ha permitido una transformación del pensamiento a nivel individual, comunitario y nacional mediante la generación y el intercambio de conocimientos. En la investigación Dimensiones de la Pobreza de ATD Fourth World se puede descargar el informe de investigación internacional, en cinco idiomas diferentes. También, pueden descargarse cinco informes nacionales de investigación, y puede verse un vídeo de 28 minutos de duración sobre esta investigación, en tres idiomas.

Al escuchar a cientos de personas que experimentan la pobreza, hemos combinado este conocimiento con el de los académicos y los especialistas a través de un proceso de múltiples debates en los que el conocimiento de cada grupo ha sido confrontado y evaluado colectivamente. El resultado de cada proceso nacional es un conjunto de dimensiones que definen la pobreza en cada país, tal y como exige el Objetivo de Desarrollo Sostenible 1.2.

Al comparar los conjuntos de dimensiones de los seis países en discusiones cara a cara, en las que participaron representantes de los equipos nacionales de investigación, se hizo evidente que muchas dimensiones eran manifestaciones locales de los mismos atributos subyacentes de la pobreza. Por lo tanto, llegamos a la conclusión de que la complejidad de la pobreza se describe mejor en términos de tres conjuntos de dimensiones interrelacionadas, como se representa en la Figura 1.

Anteriormente, seis de estas dimensiones estaban ocultas o rara vez se tenían en cuenta en los debates de las políticas.  Junto a las privaciones más conocidas relacionadas con la falta de trabajo decente, ingresos insuficientes e inciertos, y la privación material y social, hay tres dimensiones que son de carácter relacional. Éstas apuntan al modo en que las personas que no se enfrentan a la pobreza afectan a las vidas de las que sí lo hacen, y se expresan como: maltrato social, maltrato institucional, y aportes no reconocidos. 

Las tres dimensiones que constituyen la experiencia medular de la pobreza sitúan la angustia y la capacidad de acción de las personas en el centro de la conceptualización de la pobreza: el sufrimiento del cuerpo, la mente y el corazón, el desempoderamiento, y la lucha y resistencia.  Estas dimensiones nos recuerdan por qué hay que erradicar la pobreza.

Las nueve dimensiones, y, por tanto, la experiencia de la pobreza, se ven, además, modificadas por cinco factores.

 

Conjunto 1: Experiencia medular de la pobreza 

Desempoderamiento: Se trata de la falta de control y de depender de los demás, como resultado de una gran limitación en las posibilidades de elección.

Sufrimiento del cuerpo, la mente y el corazón: Vivir en la pobreza significa experimentar un intenso sufrimiento físico, mental y emocional, acompañado de una sensación de impotencia por no poder hacer nada al respecto.

Lucha y resistencia: Hay una lucha continua por sobrevivir, que incluye resistir y contrarrestar los efectos de las múltiples formas de sufrimiento ocasionado por las privaciones, los abusos y la falta de reconocimiento.

Conjunto 2: Dinámicas relacionales

Maltrato institucional: Es la incapacidad de las instituciones nacionales e internacionales, con sus acciones u omisiones, de responder en forma adecuada y respetuosa a las necesidades y circunstancias de las personas en situación de pobreza, y, por tanto, ignorarlas, humillarlas y perjudicarlas.

Maltrato social: Describe la forma en que las personas en situación de pobreza son percibidas negativamente y tratadas mal por otros individuos y grupos informales.

Aportes no reconocidos: Los conocimientos y habilidades de las personas en situación de pobreza rara vez se ven, reconocen o valoran. A menudo, tanto individual como colectivamente, las personas en situación de pobreza son consideradas erróneamente como incompetentes.

 

Conjunto 3: Privaciones

Falta de trabajo decente: Se refiere a la experiencia frecuente de no poder acceder a un trabajo justamente remunerado, seguro, regulado y digno.

Ingresos insuficientes e inciertos: Esta dimensión se refiere a tener un ingreso demasiado bajo que no permite cubrir las necesidades básicas y las obligaciones sociales, mantener la armonía en el seno de la familia ni disfrutar de unas buenas condiciones de vida.

Carencias materiales y sociales: Se refiere a la falta de acceso a bienes y servicios (educación, sanidad, vivienda adecuada, etc.) necesarios para tener una vida digna, y participar plenamente en la sociedad.

Aunque todas las dimensiones son visibles en todos los países y en la mayoría de los contextos, cada una de ellas varía en forma y grado según cinco factores modificadores:

– Ubicación: urbana, suburbana, rural.

– El momento y la duración: los episodios cortos difieren de los largos, la pobreza experimentada en la infancia o en la vejez es distinta a la experimentada en la edad laboral.

– Creencias culturales, por ejemplo, si se considera que la pobreza es causada por factores estructurales o por defectos personales.

–  Identificación con la discriminación por motivos étnicos, de género y de orientación sexual, que se suma a la asociada a la pobreza.

– Medio ambiente y política medioambiental, desde el cambio climático, la degradación del suelo, y la contaminación hasta la falta de infraestructuras públicas.

 

Perspectivas

La investigación sobre las Dimensiones Ocultas de la Pobreza se llevó a cabo deliberadamente en forma muy participativa con tres países en vías de desarrollo y tres países ya desarrollados, ya que todos ellos presentan pobreza dentro de sus fronteras.

Aunque la vida cotidiana de las personas en situación de pobreza en el hemisferio norte y en el hemisferio sur es muy diferente, la lista de dimensiones que los participantes identificaron conjuntamente con los académicos y los profesionales fue muy similar, con algunas dimensiones específicas para cada país. Esta similitud se debe a que no nos centramos en las privaciones materiales, sino en la experiencia medular de las personas que las padecen. Esto llevó a que el Secretario General de la OCDE, Ángel Gurría, declarara en la conferencia internacional OCDE – ATD Cuarto Mundo, celebrada el 10 de mayo de 2019 en París: «Ahora, por primera vez, la investigación ATD – Universidad de Oxford tiende un puente sobre el abismo que hay en los enfoques de medición entre los países ricos y los pobres«. Desde entonces, la Oficina Nacional de Estadísticas de Francia (Insee) ha incluido nuevas preguntas para medir el Maltrato Institucional en una encuesta nacional, cuyos resultados se publicarán en 2022.

Las cinco Dimensiones Faltantes de la Pobreza identificadas por OPHI en 2007 tienen similitudes con las seis Dimensiones Ocultas que hemos detectado. El hecho de que se reconozcan en el trabajo sobre la pobreza y el desarrollo, y se incorporen a los instrumentos de estudio, de modo que puedan integrarse en los indicadores de pobreza, o en los nuevos IPM, arrojaría una nueva luz que podría ayudar a un avance en la acción de base y la elaboración de políticas.

Sin embargo, el mayor reto sigue siendo situar el sufrimiento, la capacidad de agencia y la creatividad de las personas y las comunidades empobrecidas, pero no sus privaciones, en el centro de nuestros pensamientos y acciones para cumplir la meta de los ODS, consistente en «erradicar la pobreza en todas sus formas y dimensiones, incluida la pobreza extrema».

 

 

Este artículo fue publicado en Dimensiones 12